Preferimos irnos en Marzo cuando la gente ya volvió, los precios bajan un poco y, de paso, aprovechamos que durante los meses del verano suele bajar el trabajo y la ciudad está vacía.
Pero esta cuenta regresiva no termina más!!!
Tacho cada día, como un preso hasta cumplir su condena, y siempre falta mucho.
Hoy ya entramos en el último mes...
Y despues que rápido se van!
Dos semanitas para todo un año de laburo no es nada! Me enteré hace unos años que en Francia, ni bien entrás a un trabajo, te corresponden tres semanas, y al toque un mes.
La pauperización de las condiciones laborales, tambien son esto.
Pero hoy no quiero un posteo serio, así que dejo una foto de uno de nuestros destinos. Esto es Iruya, y aparte nos vamos al Macchu Picchu.
Me quiero irrrrrrrrr!!!